Cuánto cuesta la fotografía de alimentos?
El precio de la fotografía profesional de alimentos puede variar según la experiencia del fotógrafo, el tiempo que llevará completar la sesión, el equipo necesario para la tarea, la complejidad de la tarea y cuántos elementos hay para fotografiar. Durante una sesión de fotos, surgen problemas que deben resolverse en el lugar. Un fotógrafo sin experiencia puede no tener todo el conocimiento para ejecutar la tarea de manera profesional y oportuna.
Tiempo de disparo
Hay muchas variables que afectan el precio de la fotografía de alimentos. La cantidad de platos/productos, el tipo de comida, la cantidad de imágenes y los requisitos del escenario, superficies de filmación, fondos, accesorios, tamaño del escenario, requisitos de iluminación, tamaño del equipo, ubicación, etc.
Generalmente, cuanto más complejo, más tiempo lleva y, por lo tanto, más cuesta.
Tiempo de postproducción
Otro cargo que debe tenerse en cuenta en el costo de la tarea es el tiempo de postproducción y edición, que es un tiempo adicional que dedica el fotógrafo. Esto implica mirar a través de cada imagen y elegir las mejores, esto incluye el balance de blancos, la corrección de color, la corrección de la exposición de una imagen, la corrección de los reflejos y otros aspectos técnicos de la imagen que pueden necesitar retoques; por ejemplo, retocar imperfecciones, recortar una imagen según las especificaciones, crear perfiles de color y exportar medios al cliente. Esto puede llevar desde unos pocos minutos por imagen hasta unas pocas horas, según los requisitos de cada tarea.
Un Estilista de alimentos
Un estilista de alimentos puede tener un gran impacto en el set, su trabajo es agregar vida a cada alimento y resaltar el carácter de los platos colocándolos correctamente y agregando accesorios a la sesión de fotos. Un estilista de alimentos implementa cada alimento en el menú para que se vea lo más realista posible. La comida se ve diferente en una imagen y debe prepararse de manera diferente a como la cocinaría normalmente. Por ejemplo, al fotografiar pollo, es importante asegurarse de que la carne no esté completamente cocida porque seguirá cocinándose después de sacarla de la sartén. Cuando un estilista de alimentos hace su magia, puede hacer pequeños ajustes al plato y corregirlo para la cámara.